Vaciando papeleras...

Las lágrimas son los residuos del metabolismo de la esperanza.
(El niño herido, Carlos Be)

Damaged people are dangerous.
They know they can survive.
(Damage, Louis Malle )

Termina una semana extraña... Por fin cierro unos temas y abro otros. Recibo buenas y esperadas noticias. Me hacen un regalo. En unas semanas lo abro. Por fin, tengo algo de tiempo libre. Puedo escaparme incluso a ver Pa Negre. Espléndida y emocionante. Empiezo a vaciar papeleras. La frase pulula en mi cabeza desde que hace justo una semana leí la ansiada El niño herido de Carlos Be. Podéis encontrarla aquí. De nuevo, un texto bello y a la vez aterrador. Potente, sin concesiones, tal como el beletrista nos tiene acostumbrados. Yo ya tengo para rato con esa lectura en mi cabeza. No me atrevo ni a adentrarme en el espectáculo teatral de cinco horas que presenta este finde Angélica Liddell en el Lliure. Me lo comenta una amiga y enseguida me viene Carlos Be a la cabeza. Algún día cumpliré mi asignatura pendiente con esta inclasificable dramaturga. De momento, tengo otros planes y prefiero seguir acompañada de los niños heridos. Y de los quietos. Y del fantástico prólogo de Adolfo Simón. Y de las imágenes reescritas en mi cabeza. Y de todo lo demás que la ocupa. De lo que ha de llegar. Y es que en nada, otra nueva semana. Volveremos a comenzar. Quizá llegue de nuevo con buenas y esperadas noticias. Quizá traiga otro regalo. Quizá se vacíen todas las papeleras. Quizá. ¡Buen finde a tod@s!

Y no he ingerido nada ilegal de buena mañana...¡pese al vídeo! Es irrepetible y por eso lo pongo :-)