Hay taaantas cosas surreales en el mundo que nos rodea. Surreales si se las observa de cerca y tomando otra perspectiva. Siempre me sorprendo de que consideremos algunas de ellas normales, nada extraordinarias. Por suerte, hay mucha gente que sabe captarlas, sabe recrearlas, sabe compartirlas. Como Sergi Pàmies, en su genial último libro, La bicicleta estàtica, donde nos ofrece trozos de este mundo surreal pasado por la batidora de las emociones, las palabras y su particular lupa. O como Gina Ochsner, una escritora estadounidense aún no traducida, que en sus cuentos incluidos en People I Wanted To Be, nos ofrece un gran mosaico sobrenatural y surreal. O -termino- como Frank Rozasy, el creador de la imagen que ilustra este post...
El mundo es surreal... y para muestra, un botón...y hasta dos esta mañana...
Steppenwolf
Comentarios
mmm delicioso tema