No hay que llevar la contraria al destino
(Antonio Mercero)
Te voy a decir que eres uno de los tíos más listos que he conocido en mi vida
No sóolo eso, tu inteligencia sabes utilizarla con emotividad y cariño.
(Buenafuente a Albert Espinosa)
Lo más chulo es que la gente más importante de tu vida seguramente no la conoces todavía.
(Albert Espinosa)
Hay veces que te gustaría que un libro no terminara. Dejas aparte personajes, tramas, argumentos, y te dejas llevar por la sensación que produce. Esto es lo que me ha pasado con la primera novela de Albert Espinosa. Andaba a gusto, pasando páginas que hablaban sobre una sociedad futura que se medica para no dormir, sobre la historia de un chico que tras perder a su madre, se acuerda de lo que ella le enseñó, sobre una voz que habla de amor, de sexo y de dones especiales. Ignoro qué le habrá deparado la vida a Albert Espinosa sobre algunas de estas cosas, pero sí creo firmemente que sobre dones, el autor debe saber un buen rato. Y es que Espinosa tiene al menos que conozcamos un don público y notorio. Es el de atrapar con sus palabras entre oníricas y reales y el de enlazar diálogos que te meten en sus historias, dejando al lector embelesado como cualquier buen cuentacuentos haría, así, sin darse cuenta. Leyendo su novela acabo por creerme todo lo que me cuenta: que existen otras vidas, que existen los silencios con grosores, y que existen también los reencuentros inevitables.... Al final, incluso, se me pasa por la cabeza que el auténtico extraterrestre de la historia no es el personaje que aparece como hilo conductor del libro, sino que en realidad, tendríamos que buscarlo en el mismo Espinosa que nos tiene a todos engañados. Me da a mí que de forma natural se ha puesto el disfraz que mejor le conviene y cada vez que le vemos/leemos, consigue embaucarnos. Y así, atontaditos, no podemos hacer otra cosa sino pensar en la inmensa suerte que tenemos, porque por un rato ni que sea se ha puesto rostro humano y comparte sus historias, sus guiones y sus chispazos de ingenio con el resto de mortales...
Y pongo a los Cranberries, que son la BSO del libro... :-)El don me hace presentir... Bueno, no me gusta esa palabra. Digamos que me 'da' de inicio el recuerdo más terrible y también el más placentero de la persona a quien estoy mirando a los ojos fijamente.
Comentarios
Si me decido,ya te contaré. Gracias por la recomendación.
Besos!